El mundo ibérico ya ha dado el pistoletazo de salida a la montanera 2019. Ahora comienza una época en la que la dehesa se convertirá en el hábitat natural para el cerdo ibérico en Arturo Sánchez, que comienza su segunda montanera clave para su desarrollo final.
Las etapas del cerdo ibérico en la dehesa
Nacimiento y desarrollo en un ecosistema único. Esta podría ser la definición de la vida del cerdo ibérico en la dehesa, donde pasan su vida. Los primeros meses de vida tras nacer los pasarán en espacios semi cerrados o parideras, pero siempre dentro de ese entorno y con el objetivo de resguardarse de las inclemencias del tiempo.
El cerdo ibérico nace entre febrero y abril en la dehesa. Pasados sus tres primeros meses de vida y la época del destete seguirá creciendo por un tiempo limitado en cercados más grandes. Aquí continuará alimentándose de cereales y hierba hasta finales de diciembre.
La primera montanera
Entre enero y marzo, los cerdos ibéricos más jóvenes aprovecharán la montanera que no se han comido los cerdos de la segunda, ya completamente desarrollados. Estos últimos pasarán por su parte al momento del sacrificio, que tiene lugar entre enero y marzo.
El cerdo “recién llegado” a la dehesa contará con un gran beneficio aquí, como es la enorme superficie de terreno que han dejado los cerdos que ya han acabado su segunda montanera, unas dos hectáreas y media por cada animal. Esto les permite aprovechar mejor los recursos del campo.
Cuando llega el mes de marzo, la bellota está llegando a su fin, por lo que el cerdo ibérico continúa alimentándose del resto de recursos naturales que le ofrece la dehesa, como la hierba. Esta alimentación se completa con cereal puro en grano.
En Arturo Sánchez, huimos de los piensos y granos procesados. Esta primera montanera es igual de importante que la segunda, ya que nuestro legado familiar siempre se ha caracterizado por elegir los mejores cerdos ibéricos. Es así que su desarrollo óseo y muscular tiene que ser óptimo cuando entren en la segunda montanera. Esto en el “universo ibérico” se conoce con el término de que “el animal ha hecho caja”.
La segunda montanera
Tras la canícula del verano da comienzo la segunda montanera, una época esencial para el desarrollo óseo y muscular del cerdo ibérico. De octubre a febrero el animal engordará unos 80 – 90 kilos a base de bellota.
Dependiendo de la fecha de nacimiento, cada cerdo pasará en la dehesa entre 22 y 25 meses, disfrutando de una vida en plena libertad. Un entorno natural donde también se alimentará de pequeños invertebrados, flores y hierba.
Esa alimentación, junto al ejercicio que realice, influirán de forma directa en su complexión, dotando al animal de un músculo muy oxigenado y una estructura ósea completamente desarrollada. De ahí su carne rojiza, a pesar de ser un 100% ibérico y la infiltración de grasa que caracteriza al cerdo ibérico Arturo Sánchez.
El cerdo ibérico Arturo Sánchez, único entre los ibéricos
La doble montanera que caracteriza el legado en Arturo Sánchez ha sido una de las credenciales que ha permanecido viva tras cuatro generaciones. Todas ellas dedicadas a elaborar los mejores ibéricos, a partir de un cerdo único y exclusivo, trabajando en completa simbiosis con la naturaleza.
Criados en las mejores dehesas de la sierra norte de Sevilla y del sur de Extremadura, nuestros cerdos ibéricos alcanzan el doble de edad amaneciendo y anocheciendo en un entorno natural único.
Dos montaneras a base de bellota garantizan que el legado Arturo Sánchez hable por sí solo. Un desarrollo óseo y muscular completo, con una infiltración de grasa cardio saludable, cuyo aporte de ácido oleico solo es superado por el aceite de oliva.
Descubre en la Tienda de Arturo Sánchez todos sus productos 100% ibéricos de bellota.
También te pueden interesar:
En Ibérico Community | ¿Cómo son las etiquetas del jamón ibérico?
En Ibérico Community | Mogote de cerdo ibérico con hierbas frescas by Manuel Alonso