La taberna ibérica por excelencia de Sevilla, Lalola Taberna Gourmet, ha comenzado temporada mudando su ubicación. Javier Abascal y su equipo se trasladan de este modo al Hotel One Shot Conde de Torrejón, en el barrio de La Alameda.
Un antiguo palacio señorial con creatividad gastronómica
La solemnidad del que en su día fuera palacete de la burguesía sevillana envuelve la nueva ubicación de Lalola. Una taberna que desde sus orígenes ha apostado por varias credenciales.
Una de ellas es su firme apuesta por estar ubicada en pleno corazón de Sevilla. Del barrio de Los Remedios, en pleno Triana, el equipo de Javier Abascal se traslada en la nueva temporada a la famosa Alameda. Un punto conocido en la capital hispalense por la multitud de proyectos culturales y creativos que allí anidan.
En este caso, el chef Javier Abascal apuesta por seguir sumando al proyecto Lalola con una ubicación más amplia. Su diseño, el mobiliario, la nueva vajilla y una atmósfera llena de toques “premium” envuelven al comensal.
Un homenaje a la casquería del siglo XXI
La apuesta por este concepto de cocina ha sido siempre un referente en la carta de Javier Abascal. Desde que abriera la originaria Lalola en 2014, Abascal ha sido todo un pionero a la hora de crear nuevos platos que reinventaran la casquería española de toda la vida.
Una apuesta que Javier Abascal vinculó desde el primer minuto a Arturo Sánchez, quien siempre ha provisto al chef de Lalola de su producto de primera calidad. Cerdo ibérico para una cocina actual y creativa que ya forman todo un “idilio” conocido entre la prensa gastronómica de nuestro país.
Filosofía Arturo Sánchez en cada rincón de Lalola
Y así hasta llegar al primer menú degustación creado íntegramente por cerdo 100% ibérico de bellota, una fotografía que ha exportado todo un “modus operandi” marca Arturo Sánchez – Javier Abascal a más puntos geográficos.
En el menú de Lalola hay sitio para todos, como variedad de producto ibérico que provee Arturo Sánchez al chef sevillano. El menú degustación con el que Javier Abascal estrena carta y local se compone de una completa carta que comienza con embutidos ibéricos. Tartar de secreto ibérico de bellota con raíces de mostaza fermentadas o una Ensalada templada de lagarto ibérico macerado en hoising y jengibre.
Le sigue una Presa ibérica de bellota madurada durante 18 días con raviolis de setas cultivadas, o una Pluma ibérica de bellota madurada durante 25 días con salteado de espárragos y churros ecológicos. Para ir terminando, un Tocino de cielo ibérico con frambuesas.
Pero si algo ha traspasado las fronteras de la imaginación gastronómica de este país ha sido su postre ibérico, su “bocadillo más fino del mundo” como Javier Abascal lo llama. Toda una oda a la infancia y a las meriendas de siempre conocida como el Choco – chorizo, con chocolate blanco sobre lonchas de chorizo ibérico de bellota Arturo Sánchez.
Un menú aderezado con diferentes gamas de champagne Artisian, que combinan a la perfección con los productos ibéricos Arturo Sánchez.
Propuestas rompedoras que pasan también por otros guiños a la dehesa como Lengua curada en pimentón, como una oda a la caña de lomo de siempre y perfecta para el momento del aperitivo. Otra de las “joyas” que Lalola muestra con orgullo recientemente es un chuletero de carne ibérica de bellota. Una pieza que ha madurado lentamente, durante seis meses, hasta reducir la grasa, en su bodega de Lalola.
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